El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, atestiguó este jueves que le “consta” que el Ministerio de Trabajo y Economía Social va a trabajar por explorar la reducción del horario de trabajo” a una semana laboral de cuatro días y 32 horas, en el marco del «diálogo social», una medida que a su juicio «sin duda» favorecería la generación de empleo.
Nosotros siempre hemos sido partidarios de la reducción de la jornada laboral. La propuesta es interesante y me consta que el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz la está estudiando, y en el marco del diálogo social se va explorar porque favorecería sin duda la generación de empleo», ha dicho.
Trabajar cuatro días a la semana: los pros y los contras de encoger la jornada
Además, vaticinó este jueves este jueves en una entrevista en TVE que “no va a haber cambios” en el Ejecutivo después de la aprobación de los Presupuestos aunque seguirá habiendo “discusiones” entre el PSOE y Unidas Podemos, discrepancias sobre las que admitió que “la mayor parte de las veces los que tenemos que ceder somos nosotros”.
Lo hizo ante la pregunta de si cree que el presidente, Pedro Sánchez, aprovechará la tranquilidad que le dará la aprobación de las cuentas públicas para solucionar los problemas que ha habido entre el PSOE y Unidas Podemos en ciertos temas efectuando una remodelación de su gabinete en perjuicio de esta segunda formación.
“No va a haber cambios después de la aprobación de los Presupuestos, pero claro que va a haber discusiones, porque así son los gobiernos de coalición”, aseveró con rotundidad, prefigurando así que las cosas continuarán como hasta ahora, en un “sistema de checks and balances (‘contrapesos’) entre los dos socios que volvió a alabar como mejor garantía de que los acuerdos de gobierno se cumplan.
A una pregunta posterior, se zafó de las interpretaciones del PP y Vox de que en realidad es Podemos quien domina al PSOE. “Nuestra posición es modesta, somos el socio minoritario. Estamos satisfechos de algunos resultados, pero la mayor parte de las veces los que tenemos que ceder somos nosotros”, reconoció, declarándose consciente de que “nuestro peso es modesto y hay muchas cosas que no vamos a poder conseguir o en las que nos gustaría ir más lejos”.
No obstante, aunque confesó que le gustaría ser “el socio mayoritario” y tener que ceder sólo “de vez en cuando”, Iglesias también quiso deslizar que algunos le dicen que consiguen más de lo que deberían por su correlación de fuerzas con los socialistas, y no lo negó, sino que apuntó: “Nuestro trabajo es sacar el máximo partido al peso que tenemos”.
También en su línea habitual, dijo que “podemos estar satisfechos” del funcionamiento del Gobierno pese a sus “tiras y aflojas y tensiones”, y, en particular, de la “mayoría histórica” con la que se van a aprobar los Presupuestos, difícil de imaginar hace meses y de la que pronosticó que “claro que va a asegurar la legislatura y espero que algunas más”. Una mayoría que insistió en describir como “progresista”, aun reconociendo que la conformen también partidos de “tradiciones diferentes” como el PNV y el PDECat.
Fuente: https://amp.20minutos.es/